CINE | Reseña: El Triángulo de la Tristeza

Saludos aventureros, hoy les compartimos una nueva reseña referente a otra cinta nominada a los Premios Óscar 2023. Estamos a pocos días de la gran noche del cine y por ello no queremos dejar pasar la oportunidad para hablarles de "El Triángulo de la Tristeza" del director europeo Ruben Östlund, una comedia negra llena de sátira social que no los dejará indiferentes.

Sinopsis:

Tras la Semana de la moda, Carl y Yaya, pareja de modelos e influencers, son invitados a un yate en un crucero de lujo. Mientras que la tripulación brinda todas las atenciones necesarias a los ricos invitados, el capitán se niega a salir de su cabina, a pesar de la llegada inminente de la célebre cena de gala. Los eventos toman un giro inesperado y el equilibrio de poder se invierte cuando llega una tormenta que pone en peligro el confort de los pasajeros.

Antecedentes:

Ruben Östlund de 48 años, es un director sueco graduado de la Escuela de Cine de Gotemburgo en 2001 cuyos inicios en la realización audiovisual se dieron de manera autodidacta.

"The Guitar Mongoloid" de 2004 su opera primera de largometraje ganó el Premio de la Prensa en el Festival de Cine de Moscú y desde entonces sus demás películas ("Involuntario", el corto "Incident by a Bank", "Play", "Fuerza mayor" y "The Square") han sido reconocidas en escenarios como el Festival de Cine de Berlín de 2010, el Festival de Cine de Tampere de 2011, el Festival de Cannes de 2014 con el Premio del Jurado y en 2017 con la Palma de Oro.

"Triangle of Sadness" es el sexto largometraje de Östlund (pero el primero totalmente hablado en inglés), el guion fue escrito por él. La producción debutó en Cannes en el 2022 y se llevó la Palma de Oro, estuvo nominada a los Globo de Oro este 2023 y llega a la edición 95° de los Premios de la Academia con nominaciones en mejor guion original, mejor director y mejor película.

Colombia pudo verla en cines desde el pasado 23 de Febrero. También está disponible en la plataforma de streaming Prime Video desde el 02 de Marzo.

Opinión:

Lo bueno

"El Triangulo de la Tristeza" es una historia que nos presenta contextos mediáticos de opulencia, como lo son la industria de la moda y el turismo de lujo, en los que la brújula moral está guiada por las clases sociales y el capitalismo salvaje. Cargada de diálogos mordaces y personajes poco entrañables la cinta se divide en tres actos en los que se edifica una metáfora del orden social que impera actualmente y de cómo la naturaleza civilizada del ser humano se ve deformada y transformada cuando se trata de sobrevivir.

En su primera parte, cuando conocemos a Carl (Harris Dickinson) y Yaya (Charlbi Dean) vemos reflejada a la cultura digital de los influenciadores, del culto al cuerpo y de toda esta falsa felicidad que vemos en las estrellas y figuras del espectáculo. De igual modo, profundizamos en la superficialidad de las relaciones modernas y el debate frente a las pre-concepciones de roles e igualdad de género que predican los personajes, pero que claramente no aplican, sacrificando su intimidad y personalidad real por un modelo manipulado de perfección, en el cual una nimiedad como el mero acto de "fruncir el ceño" te convierte en un problema.

El segundo acto, nos lleva a conocer a diversos personajes a bordo de un impresionante yate en el que Carl y Yaya se topan con millonarios excéntricos, magnates del armamento militar, y una tripulación servicial y conformista. En este punto la incomodidad de personas que no se entienden y parecen ser incapaces de sentir empatía, sumada a las disparatadas situaciones a bordo nos permiten reflexionar al respecto de la frivolidad e insensibilidad que define a la clase privilegiada y a quienes aspiran llegar a ella.

Pero una vez que la naturaleza misma se encarga de recordar que no hay diferencias tan grandes entre los humanos, que haga que unos merezcan más que otros, la película se transforma en una divertida e hilarante trama de supervivencia. Allí lejos de la comodidad y disminuidos a un mero grupo de almas que lucha por cumplir sus necesidades, los personajes sacan su personalidad más sincera, guiada por el egoísmo y las ansias de tener poder sobre otros.

Ruben Östlund dirige con astucia un filme que no busca deslumbrar por una perfecta calidad y belleza visual, que no tiene miedo de mostrar lo grotesco y lo bajo con escenas de vomito, defecación, alcoholismo, clasismo, por mencionar algunos.

Entre el reparto de las actuaciones que mas destacan, está la de Woody Harrelson, con un pequeño pero contundente papel cuya escena sobre una batalla de ideas de corrientes políticas es sencillamente memorable. También es de mencionar la actuación de Dolly de Leon, que le imprime una fuerte presencia a su personaje de Abigail casi al punto de robarse la película. Charlbi Dean (R.I.P.) y Harris Dickinson juegan muy bien su rol de "caras bonitas" que poco a poco son desenmascarados.

A nivel técnico, destaco la puesta en escena y la edición, en especial en la cena del Capitán, un momento detonante que se va saliendo de control y que es todo un reto para los ojos y el estomago; aquí se juega con la cámara para mostrar diversas perspectivas y situaciones simultaneas que a su vez crean una continuidad de hechos interconectados, que pasan de la perfecta tranquilidad al caos más irrisible.

"El Triangulo de la Tristeza" es en verdad una tragicomedia, una bofetada que nos recuerda el frágil sistema de acumulación que nos rige y nos domina con el pretexto de la meritocracia como factor de nuestra situación social. Del mismo modo, que retrata lo que pasaría si la "burguesía" perdiera su zona de confort y se viera enfrentada a una nueva situación donde "el proletariado" domina por experiencia constante los medios y los recursos para subsistir.

Lo malo

Su estructura de actos separados hace que el guion tenga un ritmo irregular, puede llegar a sentirse pesada incluso, y para el momento del tercer acto sientes que es de esas cintas que pudo dar un poco mas, dejándote (a nivel narrativo) encartado con la tarea de resolver la conclusión por tu cuenta.

Del mismo modo, no es una película que satisfaga a todos debido a sus contundentes mensajes y alusiones, además de que no muchos estarán encantados con la sencillez técnica sumado al estilo vodevil que derrocha.

Conclusión

"El Triangulo de la Tristeza" es un acto circense y un producto de cine de autor, uno que no teme presentar fuertes criticas sociales por medio de escenarios escatológicos y paródicos de la sociedad contemporánea. Podríamos decir que es la versión más divertida y extravagante de 'El Señor de las Moscas', que actualiza la necesidad de auto-analizar nuestra percepción del mundo (como lo hicieran mentes como Marx o Hegel) y la reacción de miedo o determinación con el que asumiríamos un cambio en el statu-quo.

NUESTRA CALIFICACIÓN FINAL ES: 7/10

Póster oficial

Tráiler oficial

¡Gracias por leernos!

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