Godzilla uno de los monstruos más emblemáticos del cine regresa a la pantalla grande con la segunda parte del éxito de 2014 Godzilla. Tras la salida del director Gareth Edwards (Star Wars: Rogue One) es el reconocido guionista Michael Dougherty el encargado de dar vida a Godzilla 2: Rey de los Monstruos una explosiva secuela llena de acción épica que llegó este fin de semana a los cines.
Hace cinco años vimos al colosal Godzilla desaparecer en el océano tras salvar a San Francisco de los MUTOS, ahora la curiosidad por estas criaturas enormes denominadas "Titanes" ha aumentado y por tanto las medidas para mitigar los daños que causan. Esta vez tenemos de protagonista a la paleóbiologa Emma Russell (Vera Farmiga) quien ha desarrollado un artefacto con el que es capaz de entablar comunicación con los monstruos y con el que espera entender su propósito en el mundo, junto a ella está su hija Madison (Millie Bobby Brown); ambas son secuestradas por una misteriosa organización que busca generar el despertar de poderosas criaturas capaces de rivalizar con Godzilla. En una batalla de proporciones gigantescas. Mark Russel, el padre de Madison, (Kyle Chanlder) y un grupo de científicos intentaran ayudar a "Zilla" en medio de una trama de revelaciones y nuevos misterios sobre el lugar de los "Titanes" en la Tierra.
Lo primero a comentar sobre esta película es que tomó en cuenta las observaciones hechas a su antecesora, esta vez nos ahorran el enorme y aburrido preludio y tenemos a Godzilla a los pocos minutos de empezar la historia. Esta vez su interferencia es más que necesaria y tal como esperábamos luce impresionante, incluso posee una empatía más notable en su relación "cordial" con los seres humanos.
Pero "el lagarton" no es el único que impresiona, esta vez tenemos en escena a varios de los monstruos más icónicos del subgénero Kaiju pues vemos en su esplendor a Mothra, Rodan y el mismísimo King Ghidora todos de un realismo impactante y con gran habilidad para causar destrozos logrando generar caras de asombro ante lo colosal de su presencia. Y eso es un gran punto a favor de la película, todo en Godzilla 2 luce épico y majestuoso, tiene acción incesante y una singular belleza a la hora de mostrar destrucción, un excelente trabajo de cinematografía de Seamus McGarvey.
De igual modo, tenemos mayor cantidad de personajes en escena y si bien la mayoría son genéricos y están ahí para morir o decir diálogos convenientes también, tenemos personas muy interesantes y premisas muy oscuras que los rodean. La doctora Emma Russell por ejemplo, a simple vista parece una mujer noble de ciencia pero en realidad carga con una cruz emocional que implica a toda su familia con las acciones de Godzilla. Ese tipo de conexiones facilitan el hecho de que los humanos compartan protagonismo con los monstruos y no todos sean simples victimas de los "bichos grandotes"(si, hablamos contigo Bryan Cranston).
Ahora bien, esta es una película que a grandes rasgos parece complicada, densa y tan enorme que resulta agotadora, pero si examinamos más de cerca notamos un patrón simple en su narrativa de altos y bajos que la beneficia y la entorpece a la vez. Tiene un comienzo poderoso que se cae con diálogos pesados y que vuelve a levantarse una vez aparecen los monstruos en escena. Dicho sistema prosigue en toda la película acompañado de un ritmo acelerado que poco a poco le resta lógica a las situaciones pero suma epicidad, conceptos y posibles ideas para prolongar la franquicia.
El resultado es un guión basado en la persecución (tipo Star Wars: The Last Jedi) que la hace bastante lineal pero sumamente entretenida. Godzilla 2 continua siendo una aventura gris, fría y por instantes aterradora (igual que su antecesora) y que se toma demasiado enserio, dejando escapar la oportunidad de hacer más empaticos a sus personajes y generando que nuestro mayor lazo sea con un monstruo de 300 metros que sostiene la historia con gruñidos y fuego azul.
La película sufre de un exceso de deus ex machina que justifican la intervención de una veintena de personajes olvidables y una "co-protagonista" poco contundente como Millie Bobby Brown, que aun no logra separarse de su imagen como "Eleven" en Stranger Things de Netflix.
En resumen, "El Rey de los Monstruos" es un espectáculo de destrucción que se sostiene gracias a lo hermoso y entretenido que es ver luchar a Godzilla con sus colegas enormes. Es por mucho un filme más directo y mejor logrado que la primera entrega y no decepcionará a aquellos que esperan altas dosis de adrenalina y entretenimiento. Tiene un guión interesante que flaquea ante un desarrollo lineal pero aún así brilla por su impresionante producción y efectos de vanguardia, que no solo crean una experiencia inmersiva en imagen y sonido sino, que logran maquillar defectos y dejar un buen sabor de boca.
Nuestra calificación es: 6.9/10
---
No hay comentarios:
Publicar un comentario