CINE | Reseña: El último viaje, una emotiva película que explora el valor de la vejez plena

Saludos aventureros, hoy les compartimos una nueva reseña de una cinta muy peculiar, una producción documental en la que los populares presentadores de televisión y periodistas suecos Filip Hammar y Fredrik Wikingsson, conocidos en su país como Filip och Fredrik, el dúo lleva a Lars, el padre de Hammar, en un viaje por carretera a Francia. Una travesía llena de emociones y recuerdos que nos habla de cómo las experiencias memorables y el modo como impactamos en la vida de otros incide al momento de enfrentar la nostalgia y el golpe de realidad que llega con la edad.

Sinopsis:

Lars, el padre de Hammar, se ha jubilado recientemente después de 40 años como profesor de francés, pero en lugar de disfrutar de una "tercera edad" de viajes, vino y experiencias con su esposa, se ha vuelto pasivo y cansado. Al hacer el mismo viaje en carretera que la familia solía hacer cuando Filip era niño, y recrear algunos de los momentos más hermosos de la vida, esperan reavivar la chispa de Lars.

Antecedentes:

Fue seleccionada para representar a Suecia a Mejor Película Internacional en los 97.º Premios Óscar aunque no logró superar la lista de pre-selección. Aún así, fue un enorme éxito financiero en su país logrando una audiencia de más de 400.000 espectadores en los cines suecos en 2024.

Opinión:

El último viaje es un filme que derrocha sensibilidad y creatividad a la hora de presentar una historia real con una narrativa que imita la ficción, puesto que el humor y la emotividad que logra crear la convierten en una más que efectiva "road-trip". En la cual Filip y Fredrik aceptan la misión de ofrecer a Lars el viaje más memorable posible por territorio francés, la mayor obsesión de este admirado profesor que durante sus décadas de docencia inculcó con juegos, música, libros, y hasta cocina, el gusto y aprecio por la nación gala entre sus estudiantes.

Ahora en su retiro Lars es un hombre mayor que se siente inútil, alguien sin propósito ni objetivos, lo cual crea un gran dolor en su familia puesto que añoran la presencia de aquel hombre elocuente, divertido y activo que llevaba a su esposa e hijos por la Riviera Francesa a vacaciones de ensueño, donde la buena comida, las conversaciones amenas con amigos y la buena relación con su familia se convirtieron en memorias imborrables que vale la pena rescatar del olvido y la añoranza que trae el paso del tiempo.

Por eso, el trabajo de los directores se siente casi como una fantasía, ya que Lars es un personaje tan especial y entrañable que parece increíble todo lo que ha hecho y vivido. Sin embargo, no es una historia de vida que busca causar lastima, sino que se trata de un biopic con mucho carácter y una identidad humanista, que destaca el poder de las palabras en las personas, y cómo su correcto uso pueden ser una voz de aliento y de luz en los momentos de mayor necesidad, en este caso provenientes de un amigable docente.

Por eso también es llamativo el manejo de cámara de la cinta, que aprovecha la intimidad de los momentos más genuinos y de un humor honesto para mostrar la riqueza visual de un territorio, su naturaleza y las gentes que le habitan, así como sus tradiciones. Todos estos elementos son el imaginario que Lars quiso enseñar a sus estudiantes de su amada Francia, un segundo hogar para él y los suyos que ahora lo acoge en sus años dorados para poder reinventar la relación con su hijo Filip, que de la manera más respetuosa y con una gran admiración busca refrescarle la memoria a su padre y demostrarle que aunque los años pasan y las fuerzas no son las mismas, sigue cumpliendo un rol entre sus seres queridos y todas esas jóvenes mentes que impactó, que aún fuera de la academia le siguen agradeciendo por su vocación.

Finalmente, podemos decir que EL ÚLTIMO VIAJE es una experiencia enriquecedora, una manera distinta de abordar el género documental y el cine sueco, en la que hay un mar de sensaciones y lecciones, sobre el amor, la amistad, la confianza, y el valor de la sabiduría en nuestra sociedad; en la que a veces olvidamos que existen personas como Lars, gente mayor que dieron mucho de sí para formar a las nuevas generaciones y que hoy por hoy necesitan un empujón de animo para seguir aportando con sus cualidades. Más que recomendada para ver con padres, tíos, abuelos, maestros, y todos aquellos que nos han enseñado y aportado en el camino de la vida.