Hace nueve años empezamos a vivir una hermosa aventura con la primer película de Cómo entrenar a tu dragón; el pasado 17 de enero arribó a los cines el final de la exitosa franquicia que adapta las novelas de Cressida Cowell. El cineasta Dean DeBlois ofrece nuevamente un espectáculo visual que enmarca la enternecedora historia de amistad de Hipo y Chimuelo.
Hipo (Jay Baruchel) se ha posicionado como nuevo líder de la Isla de Berk, el jefe de los vikingos ha logrado unir a dragones y humanos junto a su fiel amigo "Chimuelo". Sin embargo, la situación cambia cuando una dragona furia luminosa arriba y encanta al entrañable furia nocturna. Mientras tanto un nuevo enemigo de nombre Grimmel (F. Murray Abraham) aparece, su deseo es exterminar a todos los furia y esclavizar al resto de dragones. Hipo y sus amigos deben unir fuerzas una vez más para defender su estilo de vida.
Lo primero a destacar de esta producción animada es su capacidad para conservarse fiel a su tono. Todo en la historia ha evolucionado, los efectos visuales, las técnicas de animación y la riqueza de este universo, pero, incluso con grandes avances en su apariencia no ha olvidado ese espíritu aventurero y familiar que la hizo tan entrañable.
Los personajes han crecido y madurado, en esta tercera entrega vemos como aquellos vikingos jóvenes deben tomar la voz del liderazgo y guiar a su gente, en un mundo que a pesar de los esfuerzos de Hipo, su madre Valka (Cate Blanchett) y su novia Astrid parecen insuficientes para proteger a los dragones de furtivos y trastornados cazadores. A esto se le suma la compleja relación de Hipo y Chimuelo, quienes, después de sobrevivir y luchar juntos por años, deben decidir cómo avanzar en su relación ante la posibilidad de que sus caminos ya no estén alienados.
Pero tranquilos no todo es tan serio y trascendental, la película tiene un ritmo ágil, un humor sencillo y digerible e increíbles secuencias de vuelo, sin abandonar la acción. Tiene un equilibrio narrativo que la hace disfrutable para cualquier cinéfilo y que ofrece un clímax conmovedor y emocionante para todos los fans.
Cómo entrenar a tu dragón 3: el mundo oculto es un capítulo definitivo en el que más que un villano abominable y complejo (Grimmel es malvado más no intimidante) priman los vínculos entre los personajes y los mensajes que generan, que aparentemente infantiles, aplican a muchas realidades de la sociedad; tal es el caso de Astrid (voz de America Ferrera) quien decide ser más que un interés romántico, y acompañar a Hipo como mujer líder de los vikingos (una clara referencia al empoderamiento femenino).
Dean DeBlois logra crear un final satisfactorio para humanos y dragones y se alza como un destacado director de animación, que sin duda, llevará a esta entrega a una posible nominación a los Premios Oscar de 2020.
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