Saludos aventureros, hoy les compartimos una nueva reseña, en la que hablamos de la nueva entrega de la franquicia G.I. JOE que cumple 57 años siendo referencia en líneas de juguetes, cómics y películas con cierto éxito y que regresa en este 2021 con la precuela de uno de sus personajes más llamativos, el asesino ninja Snake Eyes. La película debutó en segundo lugar en su apertura global de taquilla.
Sinopsis:
G.I. Joe: Snake Eyes" está protagonizada por Henry Golding interpretando a Snake Eyes, un joven solitario y tenaz que es aceptado en un antiguo clan japonés, de nombre "Arashikage", después de salvar la vida de su heredero aparente. A su llegada a Japón, el clan Arashikage le enseña a Snake Eyes los caminos del guerrero ninja, al mismo tiempo que le proporciona algo que ha estado anhelando: un hogar. Sin embargo, cuando se revelen los secretos de su pasado, se pondrá a prueba el honor y la lealtad de Snake Eyes, incluso si eso significa perder la confianza de las personas más cercanas a él.
Opinión:
Lo Bueno
El proyecto de SNAKE EYES surgió como un modo de refrescar el panorama de las películas de G.I. JOE que si bien en 2013 logró una secuela de éxito considerable no estaba a la altura de los grandes blockbuster de superhéroes. Por eso en 2018 el productor Lorenzo di Bonaventura confirmó la intención de Paramount de retomar la saga en forma de una precuela, centrada en el guerrero silencioso Snake Eyes (interpretado hasta entonces por Ray Park). En agosto de 2019 se confirmó que el actor británico-malayo Henry Golding (Crazy Rich Asians; Last Christmas; A Simple Favor) se encargaría de interpretar al personaje en la nueva cinta que inició grabaciones en septiembre de 2019 con fecha de estreno para Marzo de 2020, finalmente como sabemos su estreno fue retrasado por la Pandemia de Covid-19 y tras varias fechas tentativas se eligió el 22 de julio de 2021 para su fecha principal debut.
Ahora, tras su tibio estreno en cines su posible secuela y el nombre de la cinta como pilar de un rostro renovado para G.I. Joe aún está en veremos. Sin embargo, es nuestro deber decir que la película tiene sus virtudes especialmente en la actuación de Henry Golding, quien se compromete en cuerpo y alma para darle una personalidad, un rostro y una voz al hasta ahora silencioso héroe. Su esfuerzo es notable con el carisma que desborda, lo rápido que nos agrada su cinismo, y los matices que muestra en el desarrollo del filme, que alcanza las dos horas y se toma su buen tiempo en establecer el origen y motivaciones de su protagonista, cuyo camino lo lleva a ser el guardián y hermano de armas de Storm Shadow (interpretado por Andre Koji), aunque este aspecto no logra brillar tanto, perdiendo importancia en el clímax y retomándose para mantener la conexión con una continuación.
Retomando lo positivo, el compromiso de su casting se ve reflejado en las intensas escenas de acción y combate que en su mayoría no usan efectos visuales y se valen de la habilidad con armas, movimientos increíbles en escenarios reales y un magnifico vestuario que al igual que su ambientación en el Japón moderno crean un contraste entre tradición y modernidad. A nivel de fotografía la película destaca por el uso de los colores neón, las dinámicas escenas nocturnas y su interés por destacar el valor de la arquitectura.
En cuanto a la historia, es destacable la buena evolución de la relación entre Snake Eyes y Akiko (interpretada por Haruka Abe), mano derecha del clan Arashikage que ayuda al personaje a entender la idiosincrasia en la que está envuelto y resulta una secundaria bastante entrañable y natural. También es interesante el desarrollo de las pruebas y cómo se enredan los conflictos políticos y de intereses con la mitología del clan, convirtiendo a la cinta en una fantasía de acción que no tiene miedo de salirse del confort de su género.
Lo Malo
Si algo afecta la apreciación del trabajo del casting y el equipo técnico es el torpe manejo de cámara que hace el director Robert Schwentke (Divergente la Serie), quien por alguna razón decide sacrificar la claridad de los combates por un ágil y alocado encuadre que da la sensación de inmersión pero confunde y marea, dañando el trabajo de coreografías y en general la estética de la película.
Así mismo, es de mencionar que la complejidad de la historia que intentan contar requería un mayor metraje para lograr establecer relaciones e intenciones más claras en varios personajes. Pues muchos se sienten desaprovechados (como Hard Master o Blind Master), otros innecesarios y metidos a regañadientes en la trama para establecer conexión con el mundo de G.I. JOE, como es el caso de Scarlett (Samara Weaving) y La Baronesa (Úrsula Corberó) y finalmente, tenemos un personaje muy mal planteado y nada memorable, Kenta (interpretado por Takehiro Hira) que no intimida ni se siente como un villano de la talla del Comandante Cobra.
Conclusión:
SNAKE EYES si funciona como precuela, pero tuvo una gran responsabilidad para revivir la franquicia lo que la perjudica a la hora de intentar superar a sus antecesoras. Brilla en su labor de cambiar por completo la acción a una exótica y maravillosa locación y por entregar un casting variado, diverso y comprometido, sin embargo su mal manejo de cámara, el soundtrack olvidable y su incapacidad para ofrecer un villano digno daña su potencial y la pone al borde de lo genérico.
NUESTRA CALIFICACIÓN FINAL ES 6/10
Póster
Tráiler
¡Gracias por leernos!
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