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viernes, 22 de diciembre de 2023

CINE | Reseña: Saltburn

Saludos aventureros, hoy les compartimos una nueva opinión de cine de una de las mejores sorpresas  que hemos tenido este año. SALTBURN de la directora Emerald Fennell debutó este 22 de diciembre en Prime Video luego de un recatado paso por los cines, pero respaldada por nominaciones a los Globo de Oro y los Critics Choice Awards 2024.
Sinopsis:
Mientras lucha por encontrar su lugar en la Universidad de Oxford, el estudiante Oliver Quick (Barry Keoghan) se ve arrastrado al mundo del encantador y aristocrático Felix Catton (Jacob Elordi), quien lo invita a Saltburn, la extensa propiedad de su excéntrica familia, para pasar un verano inolvidable.

Antecedentes:
"Saltburn" es la segunda película dirigida por Emerald Fennell, tras "Promising Young Woman" (2020). Para enero de 2022, LuckyChap Entertainment de Tom Ackerley y Margot Robbie estaba en conversaciones para producir la película. En mayo de 2022, se confirmó que Ackerley, Robbie y Josey McNamara serían productores, y se unieron al elenco Rosamund Pike, Jacob Elordi y Barry Keoghan. Fennell elogió la audición excepcional de Elordi y reveló que quería generar empatía hacia personajes antipáticos. La película, ambientada en 2006, se filmó en un formato de 1.33:1 para lograr una sensación de "espionaje".

El rodaje se lleva a cabo en Drayton House, Northamptonshire, en una ubicación nunca antes utilizada para filmar. Fennell insistió en filmar en un solo lugar para reflejar la trama y evitar ajustes en la posproducción. El diseño de vestuario destaca la moda de los años 2000 con chaquetas ostentosas, camisas de rugby y joyas llamativas.

Opinión:
Lo bueno
Emerald Fennell es la mente detrás de esta nueva joya del thriller psicológico, SALTBURN es una pieza de culto, una saturada y agresiva historia que confirma el talento de su directora para crear guiones novedosos y momentos desafiantes sin sacrificar la capacidad de su grupo de actores.

El desarrollo de la relación de Oliver y Felix es fascinante en tratamiento y desconcertante en resultado, una exploración a la psiquis humana desde la amistad que lentamente se hunde en la obsesión y la perversión, con tintes homoeroticos y una extraña definición de "amor". Las actuaciones de Barry Keoghan y Jacob Elordi son increíbles, derrochando química y vigor, transmitiendo con las miradas y con su cuerpo la compleja relación de sus personajes.
Del lado de la familia Catton y sus invitados, también son destacables las actuaciones de Rosamund Pike, Alison Oliver y Richard E. Grant, que conforman un núcleo familiar extravagante e intrigante, en la que también hay cabida para Archie Madekwe, un joven talento que refleja con su rol de Farleigh el lado de una balanza de poder que rechaza a lo ajeno. Personajes con diálogos mordaces y singulares momentos de comedia negra que a su vez definen un estilo de vida marcado por el privilegio y las relaciones por interés.

Y es que Saltburn es justamente eso, una meta, una epitome de éxito que vamos añorando en compañía de Oliver, pero que poco a poco se convierte de un ambiente soñado a una prisión de oro de la que querríamos huir pero que nos embriaga lentamente con su atmosfera vampiresca de colores intensos, niebla y laberintos. Un terreno enigmático plagado de personajes interesantes cuyos caminos se hacen cada vez más oscuros y destructivos.

Cruda es una palabra bien justificada para definir esta cinta. Su directora no da tregua en poner ante nuestros ojos la visión maligna, lujuriosa y violenta del deseo, potenciada por un aspecto técnico fabuloso. Su cinematografía enmarcada en un formato 4:3 (algo poco común en la era de la relación de aspecto panorámica) junto a su diseño de producción fastuoso permite crear momentos dignos de una pintura, que se vale de reflejos, encuadres acertados e intimistas para dar belleza y significado al intercambio de fluidos más bellamente filmado de los últimos años.
Por supuesto, es también destacable la banda sonora original de Anthony Willis, que vuelve a trabajar con la directora para construir melodías con tintes de música clásica, que encajan a la perfección en este mundo de estilo victoriano corroído por la estrafalaria modernidad identificada con temas juveniles de pop y rock que rompen el solemne contexto palaciego y añaden impulsos juveniles. Tremenda curaduría para elegir los temas y combinar ambos mundos sonoros.

Lo malo
Su duración de dos horas y diez minutos puede ser un reto para los cinéfilos a los que les cuesta mantener atención, pues si bien tiene un buen ritmo, tiene instantes en los que no pasa demasiado y otros en los pasa mucho muy rápido, por lo que sumado a lo explicito de sus escenas puede ser una experiencia bastante bizarra. Su mensaje sobre el elitismo y el privilegio es más bien difuso y probablemente te obliga a repasarla, ya que su enfoque en el camino hacia la locura de Oliver te distrae bastante y cambia por completo el tono y enfoque de la cinta cuando sus ansias de venganza se desatan.

Conclusión
SALTBURN es una muestra de cine de autor, una prueba fehaciente del talento de Emerald Fennell para contar historias y sacar provecho del talento a su disposición. Es un filme sumamente teatral con diálogos divertidos e intensos y actuaciones potentes llenas de sensualidad, que derrocha estilo a la hora de explorar el status quo de la sociedad que retrata. Con el exceso y la vulgaridad a tope toca los limites a los que se está dispuesto por encajar y pertenecer a un sistema hermético, que en medio de su frivolidad se ve destruido desde adentro por un intruso que trastocó su invulnerabilidad.

NUESTRA CALIFICACIÓN FINAL ES: 8/10

Póster oficial

Tráiler oficial


¡Gracias por leernos!
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