Las adaptaciones de videojuegos siempre han sufrido a la hora de complacer a fanáticos y público en general, ya que suelen ser películas bastante mediocres o que no logran capturar la esencia de su origen. DETECTIVE PIKACHU llegó a los cines el pasado 09 de abril para aparentemente romper ese paradigma con una dosis exacta de humor y acción, en la que los Pokémon se roban el show.
Ambientada en un mundo de fantasía en el que los Pokémon existen y conviven con los seres humanos, esta es la historia de Tim Goodman (Justice Smith) un ex-entrenador Pokémon, hijo del destacado entrenador Pokémon y detective Harry Goodman. Cuando su padre desaparece en un accidente automovilístico, Tim llega a Ryme City y termina por encontrarse con el Detective Pikachu (Ryan Reynolds), el antiguo compañero Pokémon de Harry. Tim es capaz de entender al Pikachu, y se unen a regañadientes para encontrar a su padre y descubrir el misterio que rodea a su desaparición. Persiguiendo pistas a través de las calles de Ryme City, el dúo dinámico pronto descubre una trama conspirativa que representa una amenaza para el universo Pokémon.
Lo primero a destacar de la película es que es una adaptación novedosa respecto al juego, introduciendo un mejor hilo narrativo y conservando los elementos de investigación y seguir pistas, aunque caiga por momentos en deux es machina. El director Rob Letterman logra crear una aventura familiar de ritmo trepidante y cierto elemento futurista, asemejándose en atmósfera a Ready Player One de Stiven Spielberg.
Otro punto a destacar es el trabajo de voz y corporalidad de Ryan Reynolds quien da vida al Detective Pikachu. Su humor y personalidad arrolladora dotan al Pokémon amarillo de varios matices pudiendo pasar de un ser bromista y sarcástico a uno sentimental y serio en su misión. A eso se le suma su química con Justice Smith (Tim Goodman) quien logra ser un protagonista carismático e igualmente interesante.
El trabajo de producción está muy bien hecho, logrando combinar sets reales con elementos CGI y creando una atmósfera bastante real en la que humanos y pokémones conviven de diversas y creativas maneras. Es un mundo rico en elementos que no hace sentir su premisa descabellada y que ademas suma elementos de otros juegos de la franquicia como Pokémon Go.
La historia puede llegar a ser algo ridícula hasta un punto y decae en el desarrollo creíble de personajes, dando paso a la acción y las batallas entre Pokémones muy reales y otros un tanto cutres, lo que para algunos gustos puede sacarlos de la experiencia. DETECTIVE PIKACHU está a unos instantes de ser cine B pero tiene el respaldo de un equipo creativo y un cast que se toma la tarea de hacer más creíble la locura que vemos. Eso la destaca como un entretenimiento que funciona y dejará satisfechos a la mayoría, sobre todo a los niños.
En resumen, estamos ante un triunfo inesperado del cine familiar que exalta los elementos del producto que le dio origen. Tiene defectos narrativos y de efectos pero su emocionante mundo de Pokémones logra encantar lo suficiente para querer ver más.
Nuestra calificación: 6.9/10
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¡Muy interesante! Para ir a verla y lograr recordar el pasado con pokemon y nuestro pikachu 🎆👏🏽
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